¡Hoy me encendió una luz!
¿El Pentateuco comienza en Éxodo o en Génesis? Según el relato de Éxodo, Jehová se introduce, por primera vez (Ex 6:1-3), a Moisés, en la sarza ardiente, como quien llegaría a ser el dios de Israel.
Habló Dios a Moisés y le dijo:
—Yo soy Jehová. Yo me aparecí a Abraham, a Isaac y a Jacob como Dios Omnipotente, pero con mi nombre Jehová no me di a conocer a ellos. También establecí mi pacto con ellos, para darles la tierra de Canaán, la tierra en que fueron forasteros y en la cual habitaron. Asimismo yo he oído el gemido de los hijos de Israel, a quienes hacen servir los egipcios, y me he acordado de mi pacto. Por tanto, dirás a los hijos de Israel: “Yo soy Jehová. Yo os sacaré de debajo de las pesadas tareas de Egipto, os libraré de su servidumbre y os redimiré con brazo extendido y con gran justicia. Os tomaré como mi pueblo y seré vuestro Dios. Así sabréis que yo soy Jehová, vuestro Dios, que os sacó de debajo de las pesadas tareas de Egipto.
Todos lo resistieron. Cuando Jehová anunció que quiso libertar a su pueblo de la esclavitud: se esperaria que Faraón lo resistiera y lo resistió. Pero Moisés también le resiste, así como el mismo pueblo de Israel.
El libro de Éxodo termina relatando cómo Jehová superó estas resistencias y llegó a ocupar el lugar de Dios entre los esclavos escapados, en el desierto. Los tres libros que siguen el libro de Éxodo (Levítico, Números, y Deuteronomio) completan e interpretan material que está básicamente completo en Éxodo. Detallan las implicaciones frente a situaciones concretas y cuentan los próximos pasos en la historia del cumplimiento de la promesa. Se enfocan, casi por completo en el movimiento migratorio del pueblo desde Egipto, de donde habrán escapado de la esclavitud, hacia la frontera de la tierra prometida, y detallan como organizar la vida en esta nueva tierra.
Pero, ¿cómo entender Génesis? Si Génesis es del ministerio de Moisés hay que pensar en el propósito de poner estas historias en el primer rollo. En comparación con los cuatro libros que vienen después de Génesis, es muy diferente. ¿Por qué Moisés relata lo que aparece en el libro de Génesis y lo pone al principio del Pentateuco?
Medito en estas cosas en el presente, con intereses prácticas. Tengo intención y deseo de ser un buen profesor. Quiero llegar a la clase bien preparado para dar buenas explicaciones a mis estudiantes. Están pagando con buen dinero y sacrificando tiempo para estudiar la Palabra de Dios. Quieren servirlo bien. ¡qué responsabilidad!
Cuando me encendió esta lucecita en la madrugada recordé que Dios me ha dicho que esta clase es un regalo para mi. De la misma forma que la forma en que Moisés entra la historia del Éxodo le exigió de Moisés que conociera mejor el Señor que le llamaba a participar en su misión, yo entiendo también que esta responsabilidad exige algo parecido de mí. Escucho al Señor llamándome a abrirme nuevamente a sus propósitos para mi vida.
El quiere usar estos textos para hablar conmigo, llamarme la atención, y ajustar mi rumbo, y darme el valor para los próximos pasos en mi vida. La luz que encendió fue para que me fijara que para esto es el Pentateuco. No quiere que enfoque simplemente en cumplir con los requisitos del curso.
En otro lugar en el Pentateuco, en el resumen al final de Deuteronomio, Moisés enfatiza para el pueblo de Dios que éstas no son meras palabras, simplemente para que las sepamos. Son un relato que trae orientación procediente de Jehová para que su pueblo, en un momento clave en su historia, pueda vivir bien y junto con Jehová su dios pudiera compartir sus bendiciones con toda la humanidad.
»Estos, pues, son los mandamientos, estatutos y decretos que Jehová, vuestro Dios, mandó que os enseñara, para que los pongáis por obra en la tierra a la que vais a pasar para tomarla en posesión, a fin de que temas a Jehová, tu Dios, guardando todos los estatutos y mandamientos que yo te mando, tú, tu hijo y el hijo de tu hijo, todos los días de tu vida, para que se prolonguen tus días. Oye, pues, Israel, y cuida de ponerlos por obra, para que te vaya bien en la tierra que fluye leche y miel, y os multipliquéis, como te ha dicho Jehová, el Dios de tus padres.
»Oye, Israel: Jehová, nuestro Dios, Jehová uno es.
»Amarás a Jehová, tu Dios, de todo tu corazón, de toda tu alma y con todas tus fuerzas.
»Estas palabras que yo te mando hoy, estarán sobre tu corazón. Se las repetirás a tus hijos, y les hablarás de ellas estando en tu casa y andando por el camino, al acostarte y cuando te levantes. Las atarás como una señal en tu mano, y estarán como frontales entre tus ojos; las escribirás en los postes de tu casa y en tus puertas.
»Cuando Jehová, tu Dios, te haya introducido en la tierra que juró a tus padres Abraham, Isaac y Jacob que te daría, en ciudades grandes y buenas que tú no edificaste, con casas llenas de toda clase de bienes, las cuales tú no llenaste, con cisternas cavadas, que tú no cavaste, y viñas y olivares que no plantaste, luego que comas y te sacies, cuídate de no olvidarte de Jehová, que te sacó de la tierra de Egipto, de casa de servidumbre. Deuteronomio 6:1-12
En estas palabras se ve que hay ventajas para quien estudia y medita y comparte el Pentateuco. Así que, además de traer desafios para Moisés y para mí, el Pentateuco revela las bases de los cambios que vienen para ese grupo de migrantes, el pueblo de Israel.
¿Qué necesitarían para llegar a la tierra prometida y, recién escapados de la esclavitud, gobernarse?
Moisés, este servidor, y el pueblo de Israel, estamos todos en una misma historia, y tenemos necesidad de entender el momento de la historia que nos toca vivir. Necesitamos entender dónde está el Señor en esta historia, saber cómo comenzó y tener una idea de hacia dónde va. Es más que entender que Dios es fiel. Es saber a qué propósitos está dirigida esta fidelidad. Se es un historia, vale la pena ver lo que Dios ha hecho hasta el momento para poder entender dónde encajamos cada uno en esta historia.
Génesis responde a esta necesidad. Cuenta «la historia» hasta el momento y muestra como es que Jehová, dios de Israel ha estado activo, y establece que sus intenciones son universales, para todos los seres humanos, no solamente para Israel, aunque haya optado por hacer de Israel su pueblo y ser el Dios de ellos. Pareciera que quiso recordar y hablar de estas cosas–de la insistencia de Jehová en bendecir, y se la resistencia de parte de las personas que él decide usar. Génesis contribuye a la fama que Dios dice, en Éxodo, que a ganar por causa de lo que hace para con su pueblo. Hará parte de lo que el pueblo de Jehová deberá recordar y repetir. E nosotros tenemos mucho más historia–que va más allá de lo que hemos experimentado. Por increíble que haya sido nuestra experiencia, se apenas parte de lo que Dios ha hecho hasta ahora y hará en en futureo. Para vivir fielmente el momento que nos toca, debemos guardar en nuestros corazones memorias de lo que él ha hecho, no solo en nosotros, pero también en la historia hasta aqui. Estas historias deben tomar raiz en nuestra alma, en nuestra familia, cuando estamos en casa y cuando estamos en la calle y cuando estamos en el trabajo. Vale la pena hacer lo necesario para que estas cosas estén constantemente en nuestra conciencia, influyendo en como vivimos nuestro momento en el cumplimiento de las promesas que todavía no está completo.
Lo que yo estoy viviendo es fruto de una historia pasada y parte de la historia de lo que llegará a ser. Vivo a la luz del compromiso que Dios hizo con mi gente y con la humanidad. Es importante para que yo pueda vivir en el momento presente.
Personalmente, estoy recordando que Dios superó todas estas resistencias y superará las mías también. Y las superara por el compromiso que tiene con su creación, lo que estamos comenzando a ver en nuestras lecturas de Genesis 1-11. Jehovah es el autor de todo e insiste en ser conocido, insiste en cumplir con sus planes. Quiero saber cómo lo va a hacer conmigo.
¿Qué te está mostrando a ti en tu lectura de Éxodo y Génesis?
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